sábado, 31 de marzo de 2012

Lo veo a colores.

Estoy haciendo mi equipaje rumbo al futuro.
Tengo un peso aquí arriba, es mi vergüenza,
Pongo cuidado con ella porque es mi caída,
Mi compañera en soledad, mi peor insulto.
Soy el agua que se escapa entre el fango
Con fuerza, con éxito y manchada.
A lo mejor llego tarde y mal, me asfixio,
O quizá llegue a tiempo, un poco de alivio.
                       
Prometo que intento hacerlo en claves,
Mentiras, me dejo llevar entre los baches.
Solo soy lo que he sido cincuenta veces.
Ahora pienso cuando entro a los portales
Y recuerdo las caras que me han visto poner.
Vamos a enmudecer como los animales.

Quizá haya que descansar.
No nos podemos meter todo en un Jazz.
Podríamos hacerlo al ritmo de un compás,
Yo sé marcarlo con dos pies,
Tú puedes hacer los graves.
Y más tarde podríamos poner el mundo al revés,

Cuando me callo no estoy en silencio;
Llevo un ritmo con cada parte de mi cuerpo.
Es como el sol en el cielo, simétrico.
A veces podría pararlo pero no quiero.


Sergio Rodríguez.

miércoles, 28 de marzo de 2012

(Viento).

¿Qué puedo ser si dejo de mirar en mi interior?
Un cuadro sin pintar, cuerpo sin resplandor.
¿Qué podría ser si encuentro mi lugar?
Un puro corazón, luz para alumbrar.

Mano que acaricia el trigo a tientas piensa.
Suave tacto y contacto con la naturaleza.
Nervios con cauces, pura sangre con paz.
Ahora apago los focos, toca respirar.

Todo tiene sentido con un poco de música.
Cante, verdor, pulmón, encanto, sonrisas.
Tantos han muerto por ellas,
Tantos que viven ahora buscándolas.
Tanto que estaba y ahora no está.
Tanto se ha perdido y lo que queda por crear.
¿Somos nosotros o ahora ya no se puede llorar?

Con el crujir de mis pies creo en mis raíces.
No las veo, las siento, son invisibles.
Intentan hacernos olvidar lo que un día nos hizo invencibles.
Yo busco que mi lugar sea un lugar sin límites.

Sergio Rodríguez.

sábado, 10 de marzo de 2012

Fuera de horarios.

Bailo entre mis letras porque siempre fueron mías.
Nadie me señala, nunca fue necesario.
Esta ciencia es un mundo y es contrario
A mis tretas, a tus sueños y a tus interesantes días.

Dale cuero a mis rieles, no soy ateo.
No me descartes, creo en todo lo que veo.
Todo está lleno de dioses, a veces lo pienso.
Ya lo decía Tales, me hundo en el Egeo.

Mi vida es una base de ritmos con vudú.
Los hay suaves, rápidos y el que quieres tú.
No prometo nada, embaucaré a tu espíritu.
Meteré la rutina en una caña de bambú.

Mientras todos duermen ya sabes lo que haré.
Me voy a enamorar y a cruzar esa frontera.
Después al despertar diré que fue mentira
Y cuando me dé la vuelta sonreiré a mi vientre.
Cambio de compás, poesía tosca es la esencia.
La fragancia es lo que corrompo, para bien o mal
Fuego y agua van a fluir, hoy estoy omnipotente.

La mente en la noche, libertad para los parias.
Mi mente en la noche, si tú supieras.

Lo más duro, lo poco probable.
Lo más suave, el terciopelo.
Lo más bonito, el pensamiento.
Lo más caliente, mi piel.
Lo más feo, el techo.
Lo más frío, tu hueco.

Ahora siente.

Sergio Rodríguez.

domingo, 4 de marzo de 2012

¿Ves la luz?. Pulsa el botón, ya verás que sensación.

Este es mi camino, lleno de mentes.
No quieres verlo, mientes.
Sacia tu sed, asientes.
Cruzas mi piel, sientes.

Vibración, ponte a prueba.
Un cuento, es la escena.
Tu cara, un poema.
La mía, una treta.

Ahora lo ves, ahora no lo ves.
Ahora me crees, ahora no me crees.
Si te pido que cuentes hasta cien…
Me volverás a comer.

Silencio, la tierra habla.
Es simple, cuenta mi historia.
Mi sombra, es su cama.
Duerme sola, jamás.

Ahora solo me escucho,
Me oigo y me desconecto.
Es el negro y el blanco,
La mejor combinación.

Sergio Rodríguez.