domingo, 22 de abril de 2012

Auf dem Tisch.


Me había encontrado pero ahora estoy perdido.
Nadie me oye, ni falta que hace.
En la negrura de la noche lo cuento todo
Y por el día nadie lo sabe.
He tenido días de múltiple fracaso,
También los he tenido fuertes.
Mis dedos saben lo que siento,
Eso no le importa a nadie.
Ahora no sé ni dónde voy ni de dónde vengo,
Mi cabeza sufre traqueteo de trenes.
No hay quien los pare, quiero y no quiero ver el mío.
Prefiero estar solo para que no me falte aire.
Hay veces que creo que no es mi tiempo,
Hay vacío de gentes y de mentes.
Llamadme tonto, loco o estúpido
Pero sigo creyendo en el paisaje
Visto con otros ojos.

domingo, 8 de abril de 2012

Pero así.

Nada comparado con los roces de la piel.
Si pudiéramos oír el tacto, después el ruido;
La cadena de sentidos dispuestos al placer
Cambiaríamos todo el aire por un suspiro.

Respeto es tratar a cada tarde de usted.
Nunca se sabe cuando de verdad has cumplido.
Las relaciones humanas son como vías de tren,
Su monotonía hace muerto a lo vivido.

La calidad está en el ahora vas y en el ahora vienes,
No hay sitio para el que no despierta y se queda dormido.
La lucidez la poseen quienes se aprietan las sienes.
¿Cuánto das por unos ojos que lleguen hasta el fondo?.

Las ciencias y las letras dan igual para enloquecer.
Mis ojos ven mar adentro, soy un loco.
Un loco de la reflexión, amor por ella con creces.
Aquí mi mente vuela con queroseno. 

Sergio Rodríguez.